domingo, 4 de septiembre de 2011

Cuando los Hijos se Van

Saludos,

Me he tomado un tiempo antes de escribir esta entrega, en realidad me he tomado todo el tiempo que he querido y creo que he debido quizas esperar un poco mas. Ya se daran cuenta que la introduccion es confusa y tan confusa como este revuelto de sentimientos que tengo en el corazón y que aprieta mi pecho cada vez que trato de liberarlos.

Me he prometido dejar de lado (por consejo de mi buen amigo Kike Villacorta) el drama de mi vida. Esta es una tarea compleja para quien hace del drama una parte importante de su vida porque mediante ello siento que mis deseos y mis pensamientos son mas importantes, el drama de alguna manera me acompaña como esa imagen que me dice" lo tuyo es importante, sigue adelante".

Pero bueno, eso es algo mío, de lo que quiero hablar es de esto que empieza, en realidad empezó hace mas de un año, a suceder en mi vida y en la vida de los miembros de mi hogar. El hijo mayor empieza a alzar el vuelo del nido, empieza el momento de poner en acción todo aquello que uno aprendió acerca de criar a los hijos, darles herramientas para luchar en la vida, ser positivos y pensar que les irá bien, el momento de entregar la posta.

Esto es de verdad, esto no es una película de Cine en donde el final lo conoceremos en una par de horas, esto es un proceso, lo mas importante es que se trata de la vida de mi hijo, de aquel pequeñito que cargue en mis brazos hace no mucho y que ahora cree que es el dueño de su destino, que sabe más de lo que realmente sabe, que mira con un aire de "no te preocupes papá, ahora estoy yo al mando". Veo mis fotos cuando tenia su edad y lo miro de lejos y es la misma sonrisa, la misma expresión, pero somos distintas personas, con metas diferentes, con sueños distintos, pero con el cariño de siempre, él sigue siendo mi hijito, mi cholito, mi pechito de gato.

Creo que al fin del día eso es lo que cuenta, el Amor de un Padre a su hijo y del Hijo a su Padre, eso seguirá estando presente, nada cambiará mi cariño por él y estoy seguro que en su corazón siempre hay amor para su Padre. Ejercitar todo esto es un desafio, que tan fácil es decirlo y escribirlo, que tan fácil es dar consejos a los demás, pero que gran desafio es vivirlo, amarrar todo aquello que uno cree, todas esas teorías que aprendido y ponerlas a favor del bienestar de nuestros hijos, de mantener la comunicación para que cuando necesite a su Papá esa vía de comunicación siempre este abierta.

Que grande bendición para un hijo es clamar por ayuda a su Padre y escuchar de inmediato esa voz que te dice "Hijo, aqui estoy", cuanta paz puede eso traer a una vida jóven, alborotada, deseosa de hacer todo y todo al mismo tiempo. Esto lo hago en homenaje a mi Papá y por el Amor que tengo por mis hijos. Tengo la bendición de escuchar a mi viejo y deseo que mis hijos tengan a su Padre listo para apoyarlos, para quererlos, para decirles "Hijo, aqui estoy".

Cuanto necesitamos los Hijos de Nuestros Padres, y cuanto necesitamos los Padres de nuestros Hijos. Los jóvenes de hoy se hacen adultos muchas veces sin el amparo de sus Padres, la vida les ofrece un sin número de opciones en las que el espacio para un adulto es casi nulo porque lo que quiere es deborar esa juventud llenade energía. Los adultos nos alejamos de nuestros jóvenes buscando el espacio propio, la satisfacción después de años de labor, sin darnos cuenta muchas veces que aquello es para siempre y que nuestros jóvenes ahora nos necesitan tanto o más que como cuando eran niños pequeños.

"Juventud divino tesoro, ya te vas para no volver, cuando quiero llorar no lloro y a veces lloro sin querer". Te quiero querido hijito, que nuestro buen Dios alumbre tu camino y que inflame en ti el deseo de reconocerlo en todos tus planes y desafios, mi corazón siempre esta al lado tuyo, que Dios te Bendiga!

Gracias por leerme,
LG