lunes, 3 de agosto de 2009

Porqué sigo Casado!

Saludos!

A raíz de un par de eventos, de los que no daré mucho detalle por razones obvias, e he puesto a reflexionar acerca de por qué sigo casado! que más que una pregunta es justamente una expresión que me lleva a reflexionar sobre el tema. La Familia y el Matrimonio está en crisis, qué duda cabe, aún cuando sectores que eran opuestos a la institución ahora la reclaman como parte de sus derechos, huelgan explicaciones....

Mi posición muy personal con respecto a este tema es que el Matrimonio representa el grado máximo del compromiso que una persona puede aceptar en su vida. Esta responsabilidad es opcional, es decir, no todos estamos en la obligación de casarnos y aceptar dicho encargo. Digo que es la expresión máxima de responsabilidad porque tiene dos variantes que son importantes: tiene un impacto en la vida de las dos personas que se involucran en la relación matrimonial y además en la vida de las personas que vendrán fruto del Matrimonio. Segundo, pero no menos importante, la responsabilidad se acepta por Amor, siendo el Amor el sentimiento que significa una entrega desinteresada en favor del ser amado.

Ciertamente uno tiene la libertad de deshacer sus compromisos y dejar de lado aquello para lo que finalmente cree que o no estuvo preparado para afrontar, o que quizás las condiciones variaron en el tiempo. Desde un punto de vista legal y religioso, la separación de los cónyuges es la medida más extrema, la medida final, pues lo que se busca es que la relación se mantenga y que los involucrados hagan su mejor esfuerzo porque así sea. No se puede, definitivamente, declarar un par de razones, o muchas más como las únicas que se apliquen a cada caso, partamos del principio que las personas si bien es cierto que en escancia todos somos iguales, la individualidad de cada quien hace que tengamos mundos internos distintos, por lo que mantener relaciones y compromisos son una cuestión íntima de los individuos.

Lo que sí puedo decir, para que las cosas no queden en ese limbo de pseudo libertad, es que hay reglas y normas que en la relación matrimonial deben cumplirse para que las cosas caminen dentro de los cánones que corresponden. Voy a enumerar algunos de esos puntos, la numeración no tiene relación con el grado de importancia y obviamente esto es mi perspectiva solamente:

1. El matrimonio es opcional, uno acepta (o debe aceptarlo) de manera libre e incondicional.

2. La razón fundamental de aceptar dicha responsabilidad es el Amor entre dos seres (en mi opinión entre un hombre y una mujer).

3. La fusión espiritual en la que se involucran los cónyuges, los lleva a tener una intimidad tal que no es comparable con ninguna otra relación. El compromiso, respeto y soporte entre los dos cónyuges está por encima de las demás relaciones, por encima incluso de los hijos que se engendren. Aquel que no ha comprendió esta verdad, no ha llegado a comprender la razón del Matrimonio.

4. El compromiso adquirido está ligado al grado de madurez progresivo que ambos cónyuges deben ir adquiriendo de acurdo a como avanza la relación, de los desafíos que encuentran, de los compromisos que adquieren juntos, etc. etc. No hay espacio para que de manera unilateral cualquiera incumpla sus responsabilidades porque un buen día se le ocurrió que quizás no era lo que querían.

5. El marido es el conductor de la vida de su mujer. Es responsabilidad del esposo, dirigir el matrimonio de la forma tal que su mujer sea absolutamente feliz y se sienta realizada en todos los aspectos de su vida. La esposa tiene como responsabilidad suprema dar el soporte emocional, afectivo, espiritual, etc. para su esposo afín de que el pueda hacerla feliz de la manera planteada. La felicidad del esposo es la felicidad de su esposa y viceversa, aquí es donde la fusión de la que hablamos antes se hace tangible.

6. El mundo de rosas y onírico existe por momentos, momentos sublimes que llegan para dar ese toque distinto que la rutina nos quita con su trajinar diario. El Matrónimo enfrenta todo aquello de lo que hablamos antes, es denigrado y menospreciado, las familias se desintegran, las personas solo quieren hacer su propia voluntad, no asumen sus responsabilidades y acusan a los demás de sus fracasos.

Le dije el otro día a un amigo muy querido: "estoy agotado, psicológicamente cansado pero sigo adelante porque Amo a mi esposa y a mis hijos, esta es mi función y mi responsabilidad y seguiré adelante pidiéndole a Dios que me ayude y que renueve mis fuerzas".

Sigo casado porque Amo a mi Esposa, tenemos 16 años de casados y 21 años de relación sentimental, dos hijos y miles de historias, ella y yo somos uno, Dios nos trajo al lugar ideal donde aprendimos la lección, aprendimos a ser marido y mujer, padres y el valor de una familia.

Gracias por leerme!
:) LG

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta chévere, es cierto el matrimonio más que un jardín de rosas es fortín de responsabilidades.

Como en todo lo que hacemos en esta vida hay que mantenerse enfocado en el propósito. El propósito del matrimonio es que dos seres se hagan uno para la honra y gloria de Dios. Los frutos son los hijos y los bellos momentos, pero también están las dificultades que hay que aprender a sobrepasar.

Emy y yo tenemos 30 años de estar en una relación y no hay día que pase sin que le recuerde a ella que estoy enamorado. Con los años uno aprende a acoplarse pero es un proceso muy difícil; un secreto te digo: cuando al final uno se acopla al otro los momentos son muy bellos. El depender del uno al otro sin temores ni rencores es un éxtasis de emociones que uno disfruta mucho.

La confianza y la tranquilidad es una herramienta muy fuerte para fortalecer el Matrimonio, y eso llega con los años y el sacrificio de cada uno también. 25 años casados en Septiembre y en Abril 30 años del primer beso WOW, menos mal que comencé a los 12…
Jose Luis